Proteger la información de la empresa, aprendiendo las pautas y consideraciones para gestionarla de una manera adecuada y segura.
Hoy por hoy, las redes sociales son una herramienta de gran valor para las empresas, permitiendo dar a conocer sus productos o servicios, y a la vez establecer un trato más cercano con los actuales o potenciales clientes. La publicación de imágenes, vídeos y chats interactivos son un escaparate digital para muchas organizaciones que se valen de estas aplicaciones para llegar a un gran número de usuarios, de una manera mucho más personal si lo comparamos con cómo se presenta una empresa en una página web.
El teletrabajo es sin duda uno de los retos actuales que más preocupan a las empresas y no es para menos, si pensamos que cada vez hay mayor incidencia de ciberataques sofisticados y por tanto sus tasas de éxito son mayores.
El sector de la construcción está formado en su gran mayoría por pymes, micropymes y autónomos con plantillas y lugares de trabajo que varían con frecuencia según el tamaño y ubicación de los proyectos que van surgiendo. Reformas de viviendas, construcción de edificios, carpintería, aislamiento, fontanería u obra civil son algunos ejemplos de actividades pertenecientes al sector de la construcción, que han ido adoptando nuevas tecnologías asociadas al Internet de las cosas (IoT) para gestionar, de forma rápida, sus stocks de materiales, la ubicación de los mismos, así como la de sus plantillas, entre otros.
Desde el año 2017, cada 27 de junio, se celebra el Día Mundial de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas. En este día, promovido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se reconoce el papel de estas empresas en el impulso de las economías cuyo papel principal es el fomento del desarrollo y el empleo. Este reconocimiento está englobado dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
El 17 de mayo se celebra el Día Mundial de Internet, abordando el tema: “Puesta en valor de Internet en crisis COVID-19”.
Actualmente, uno de los incidentes de seguridad que más afecta a las empresas es la infección por ransomware, que secuestra nuestra información y pone en peligro la continuidad del negocio. ¿Sabes cómo protegerte y actuar frente a este tipo de incidentes?
Vivimos días de sobreinformación en medios digitales, redes sociales, mensajería instantánea, etc. Por eso es tan importante que aprendamos a distinguir las fuentes oficiales y la información veraz y así evitar la difusión de bulos y noticias falsas. Además del perjuicio social que pueden producir este tipo de noticias, cabe la posibilidad de que detrás del mensaje se esconda un enlace malintencionado que derive en una descarga de malware o redirija a una página fraudulenta.
En un día típico de trabajo se dan muchas circunstancias en las que se nos requiere urgencia e inmediatez: periodos de facturación, plazos inamovibles, fechas de cierre o compromisos inaplazables. Los ciberdelincuentes lo saben y se valen de estas circunstancias para usar la ingeniería social a través del correo electrónico y que «piquemos» en cosas tan cotidianas como descargarnos un archivo adjunto (una factura, imagen, hoja de cálculo, etc.).
Hoy en día el fraude online es una de las ciberamenazas que más preocupa a las empresas. A través de la ingeniería social y las herramientas tecnológicas los ciberdelincuentes juegan sus cartas para engañar tanto a empresarios como a empleados. Este tipo de engaños normalmente se realizan a través del correo electrónico y tienen una motivación económica para el ciberdelincuente, el cual se lucra a través del engaño, la estafa y la extorsión.