Las redes de control industrial de mayor escala y complejidad presentan riesgos y necesidades de ciberseguridad que habitualmente no pueden alcanzarse aplicando un modelo de segmentación tradicional. Factores como la presencia de equipos obsoletos críticos, equipos gestionados por terceros o el incremento en la presencia de tecnologías IoT que requieren conexiones externas, están motivando la adopción de arquitecturas más avanzadas a la hora de aplicar el principio de defensa en profundidad.
Una correcta segmentación puede ser un aspecto fundamental en la prevención de ataques, fundamentalmente en su propagación hasta activos esenciales y críticos en la producción. También resulta importante, adecuarse al entorno a segmentar. Es un error muy común tratar de segmentar las redes partiendo de conceptos y esquemas similares al entorno IT.
En este artículo se expondrán algunos nuevos modelos de redes y consejos para trabajar en una segmentación correcta en un entorno donde conviven diversos componentes implicados (OT, IIoT, IT, IoT).