Protección de la información
La información constituye uno de los activos más importantes de cualquier organización, independientemente de su tamaño o actividad.
La cartera de clientes, la propiedad intelectual, las tarifas o las ofertas que presentamos a nuestros clientes y que nos permiten posicionarnos frente a la competencia, los planes estratégicos para el crecimiento de nuestro negocio, nóminas, cuentas bancarias, etc. son ejemplos de información que debemos proteger en la empresa.
Para ello tenemos que implantar medidas preventivas y reactivas en nuestras empresas, destinadas preservar y proteger la confidencialidad, la disponibilidad e integridad de la información.
Estas salvaguardas serán proporcionales a la criticidad de la información que manejemos, por ello será importante identificarla y clasificarla. Las medidas también serán acordes a los sistemas a proteger, la información que contienen, las condiciones particulares de cada emplazamiento y las amenazas a las que se exponen.
A continuación podrás consultar el capítulo sobre Protección de la información de la colección «Protege tu empresa». En él abordamos de forma extensa todos los aspectos de la ciberseguridad relativos a esta materia.
Si quieres profundizar sobre algún detalle relativo al tema revisa: las infografías, los videos, la documentación de soporte y los enlaces a recursos relacionados.