Instituto Nacional de ciberseguridad. Sección Incibe
Menores. Sección menores

Conoce a fondo... YouTube

Fecha de publicación 12/12/2019
Imagen decorativa conoce a fondo YouTube

¿Sabías que YouTube no solo permite ver vídeos? También es una red social, y probablemente es la primera con la que tienen contacto los menores. Esta plataforma es un espacio de comunicación que madres y padres debemos conocer para poder enseñarles a usarla con seguridad.

YouTube tiene más de mil millones de usuarios en todo el mundo. Seguro que hemos visto como con solo unos meses de edad, muchos bebés ya visualizan vídeos en esta red social. A medida que van creciendo, niños y adolescentes demandan más tiempo para ver vídeos o incluso se animan a crearlos. ¿Por qué les resulta inevitable encadenar un vídeo tras otro durante horas?, ¿en qué se diferencia de otras plataformas, como la televisión? Comencemos por ver sus características:

  • Plataforma de vídeos: los creadores de contenidos tienen su propio canal donde publican vídeos de todo tipo de temáticas. Los usuarios/as pueden acceder a ellos y visualizarlos, a la vez que tienen la opción de compartir su opinión al respecto, conocer personas con aficiones comunes y seguir a sus youtubers favoritos.
  • Edad legal para acceder: a partir de los 14 años el menor puede crear su propia cuenta. Si la cuenta está supervisada a través de un control parental como Family Link, el menor la podría crear con 13 años. Pero esto no es requisito para la visualización de vídeos, excepto para aquellos marcados como ‘contenido con restricción de edad’.

Por qué les gusta YouTube

Desde luego, si hay un lugar donde es difícil aburrirse es YouTube, con millones de vídeos a su disposición sobre todos los temas imaginables, y muchos son creados por personas de su edad. Pueden visualizarlos en cualquier momento del día, de modo que siempre tienen contenido disponible. Por el contrario, en la televisión los contenidos son limitados y se rigen por una planificación horaria.

La mayor parte de los vídeos son gratuitos, pero existe una opción de contenido exclusivo, YouTube Premium, similar a otras plataformas como Netflix o HBO. Mientras se reproducen los vídeos aparece publicidad, pero la sensación para los menores puede ser menor que en otros medios, ya que, los anuncios se reparten por la plataforma y solo en ocasiones interrumpen los vídeos.

El funcionamiento es dinámico, con vídeos habitualmente cortos, que se pueden reproducir de forma consecutiva, ofreciendo simultáneamente funciones sociales (dar me gusta o no me gusta, comentar y compartir). En YouTube pueden contactar con otras personas, seguir a youtubers de referencia para ellos y compartir opiniones sobre temas que les interesan.

Imagen niña YouTuber jugando

Además, existe cierta presión social entre los niños y los adolescentes por estar actualizados. Si sus amigos/as hablan sobre los contenidos que han visto en YouTube, nuestros hijos/as sentirán la necesidad de ver los vídeos para poder participar en la conversación e integrarse.

Recomendaciones de seguridad para YouTube

Los menores deben aprender cómo gestionar tanto contenido a su alcance. Dado que muchas veces somos los adultos quienes ponemos a su disposición esta red social a edades tempranas, tenemos la posibilidad de enseñarles desde el principio cómo elegir contenidos positivos y evitar aquellos que puedan ser perjudiciales. Debemos recordar que esta plataforma está dirigida a personas mayores de 14 años y algunos vídeos pueden contener lenguaje inadecuado, mensajes violentos o complejos para un menor.

Es preferible que comencemos seleccionando nosotros los vídeos que pueden ver, fomentando progresivamente su autonomía y su responsabilidad. Al principio, podemos activar el modo restringido u optar por YouTube Kids, donde los contenidos están enfocados a los menores de 13 años.

Para evitar que visualicen contenidos inapropiados o fraudulentos por error, es mejor desactivar opciones como la reproducción automática o las playlists, eligiendo manualmente cada vídeo antes de reproducirlo. También hay que tener en cuenta que las portadas de los vídeos no siempre muestran el contenido real o utilizan titulares sensacionalistas o engañosos para llamar la atención, lo que se conoce como clickbait. Por ejemplo, algunos vídeos que supuestamente contienen dibujos animados pueden ser una parodia enfocada al público adulto. Por ello, es fundamental enseñar a los menores el porqué de estas estrategias, reforzando su capacidad de crítica y mejorando su alfabetización mediática.

¿Nos preocupa el uso excesivo de esta aplicación? De nuevo podemos emplear la mediación parental para establecer normas, límites y horarios que les ayuden a gestionar los tiempos de uso de Internet. Entre las opciones de seguridad que ofrece YouTube, podemos desactivar las notificaciones, limitando así la presión para visualizar las últimas novedades de sus youtubers favoritos o configurar una alerta que les anime a ‘tomarse un descanso’ cuando se excedan viendo vídeos.

Debemos tener presente que YouTube es ante todo una red social, que permite publicar comentarios e interactuar con otras personas. La protección de su privacidad siempre es una prioridad, más aún al poder contactar con desconocidos. Por esta razón, deben acostumbrarse a reflexionar sobre la información que comparten, limitando la exposición de datos personales, usando apodos o pseudónimos. Es útil hacerles entender que hay personas que pueden utilizar esa información de forma perjudicial para ellos o que pueden atraerles hacia comunidades peligrosas o poco saludables.

En ese intercambio de opiniones que se da en YouTube, a veces los menores emiten o reciben comentarios ofensivos o excesivamente críticos, generando situaciones de conflicto que pueden desembocar en una situación de ciberacoso. Dialogar con ellos/as sobre este problema de forma habitual es la clave para mostrarle cómo relacionarse de forma positiva y pedir ayuda si es necesario.

Una forma de supervisar la actividad que realizan en la aplicación es preguntarles con naturalidad qué ven, qué han comentado o qué han opinado otras personas de sus publicaciones, así como proponerles problemas que pueden surgir y escuchar qué recursos poseen para hacerles frente, lo que permitirá valorar en qué aspectos debemos insistir más.

¿Y si mi hijo/a decide que quiere ser youtuber? Hoy en día es una profesión muy apreciada por los menores y algunos quieren publicar ya sus propios vídeos. Si ese es vuestro caso, valorad si poseen la madurez necesaria para convertirse en creadores de contenido porque tendrán que afrontar la presión social que existe en este entorno y su trayectoria influirá en el desarrollo de su personalidad.

En cualquier caso, siempre debemos promover la publicación de contenido responsable, generando vídeos con un mensaje positivo para otros niños y adolescentes. Esta actividad debe estar supervisada por los adultos, de manera que aprendan progresivamente a proteger su privacidad y evitar los riesgos.

YouTube en positivo

Una plataforma como YouTube posee un gran potencial siempre que se utilice de forma adecuada. Ya hemos dicho que ofrece millones de vídeos, solo debemos seleccionar aquellos que son adecuados para el entretenimiento de los menores.

Además, podemos aprovechar su lado más educativo, ya que muchos contenidos están creados para formarse en todo tipo de aficiones o ámbitos académicos. Así, podemos encontrar vídeos que les apoyen en el aprendizaje de las lecciones escolares, que les motiven para aumentar sus conocimientos culturales o que fomenten hábitos saludables como el deporte o las aficiones artísticas.

Como siempre decimos, lo esencial es acompañarles en sus primeros pasos, estar con ellos/as durante la reproducción de vídeos y configurar juntos las opciones de seguridad.